Al que madruga...

Chiquillo:

Tú que estás partiendo en este mundo jurídico de tramitación, seguramente debes dejar las patas en la calle como muchos de nosotros hicimos al principio, así que relájate y sigue este pequeño primer consejo; además que no te darás ni cuenta y la experiencia en la calle te habrá dado la base para poder aplicarla en el escritorio y no serás tú quien lleve el papel para el cargo, será otro aprendiz que entregará tu propia creación al Juzgado. Es cuestión de tiempo, te lo digo por experiencia. Hoy en día, luego de meses de haber dejado las patas en la calle y con algodones en los zapatos, puedo disfrutar de ser yo mismo quien escriba lo que yo quiero en un papel para tramitar una causa y pararme de mi escritorio solamente para ir a los Juzgados a audiencias, pero como digo, todos lo hacemos y todos lo harán, es cuestión de tiempo, pero tienes que ser lo suficientemente humilde como para darte cuenta que el principio de este camino es así y a veces es duro, pero es la forma de aprender y el jefe de tu jefe también lo hizo en su momento; y si no fue así, seguramente lo único que sabe es constituir sociedades con un modelo pre existente.

Es muy probable que pensaras en algún momento, sobre todo cuando partiste en esto, que te levantas tipo 9 y a las 10 estás en el Juzgado, ves tus causas y te vas a tu casa muy feliz; pues no es así, ya que si vas a cualquiera de ellos después de las 10, te encontrarás con las interminables colas y muchos expedientes no habidos.

Es muy simple, parece de perogrullo, pero muy pocas personas lo hacen. Los Tribunales de Justicia comienzan su funcionamiento a las 8 de la mañana. Es cosa que hagas un pequeño esfuerzo y si estás a esa hora en Familia, puedes ver más de los 10 minutos porque no hay nadie esperando, a las 8:20 estás en los Civiles y en media hora ya viste todos los expedientes, porque como es temprano y los funcionarios están recién con el café, andan de buen humor, por lo que si no están los expedientes en la letra, igual los encontrarás porque podrás ver la costura, charlar con el actuario, te darán la copia de la dúplica, de las excepciones o de lo que hayan presentado y que, eventualmente, debes contestar; en fin, si partes a las 8 de la mañana en punto, a las 10, 10:30 ya estás listo y te puedes ir, pero si vas a las 11 ó 12, ¡ufff!, no saldrás muy luego y es muy probable que sean las 13:30 y aún tengas mucho por ver.

Inténtalo, no está de más.